Una palabra olvidada,
un dicho profundo.
Un sentir que hiere
y unos ojos sin mundo.
Una boca casi cerrada,
dos manos en un nudo.
Un sueño que no vuela
y un amor inseguro.
Un pisar tan vacilante,
una dirección sin rumbo.
Una flor que marchita
y un andar sin futuro.
Una vida no vivida,
un ahora que desvela.
Un grito que nace mudo
y rebelarse en un segundo.
Una palabra olvidada,
un sol que nace oscuro.
Quererte es un camino
que se lía en un segundo.