Tarde de otoño, me inclino sobre ti,
los últimos rayos de sol se deslizan por la ventana
dibujando el ocaso sobre tu piel
y yo trazo senderos con mis manos sobre tu cuerpo
senderos que evitan que me pueda perder
no deseo nada mas, es todo lo que quiero
contemplar tus ojos brillantes devolviendo mi reflejo,
tu mano apresando la mía, tus labios perfectos
nada surca mi mente en esos momentos, nada pido y nada espero
Si pudiera quedarme en ese instante,
Si pudiera hacer el milagro de parar el tiempo
Detendría las agujas de mi reloj en el momento en que te beso,
En que escucho la vida en tu interior,
Cuando descanso mi cabeza sobre tu pecho
Si pudieras quedarte conmigo esta noche
Y todas las noches del mundo entero,
Después el día amanecería y eso sería suficiente
Encontrarte a mi lado, volverme despacio y contemplarte
Tus ojos, tu sonrisa, tus labios perfectos
Y sentir que nada mas me importa en ese instante
Solo dejar que los segundos pasen a tu lado y quedarme,
Eso es lo único que quiero.