Rafael Elias Huerta
Agua clara
Hoy comencé mi día
descorriendo las cortinas de un pasado
incierto y meditabundo, sensible
la piel del tiempo se erizó de nostalgia
y mi mundo con cielo nublado giró
bajo una lluvia de silencio
mientras el reloj, atento vigilante receloso
caminaba lento, tan lento
que dolía su tic tac cuando a su paso,
flotando entre cortinas blancas
la musa multicolor con displicencia, apareció.
Se diluyen suspiros en el humo del cigarro
y los fantasmas borrosos
de un deseo no pronunciado, de una ilusión
que salió a pasear y no volvió, no regreso
por el perdón de madrugadas, por ese adiós
con ausencias bastas, por ese beso
que no se dio y por la cicatriz que dejó
entre los adoquines de una calle empedrada
con desencanto y desilusión la espera.
Aún así, no me quejo, la lluvia cae sobre mi rostro
y moja mi piel aún tibia por los sueños
que esperaron a que el sol los alumbrara
movido por una rotación benevolente,
con el deseo ineludible de renacer en agua clara,
como un pez.
autor...reh