Baratza01

Sinfonía del presagio

 

 

“Y tú, que eres nota de allegro y un adagio,

dígnate desde ahí a animar mi acento”.

 

Señora mía, mía en el presagio,

en el presagio blanco que evita un naufragio;

en la letra que vaga en un vals con el viento.

 

Tan mía en el concierto del contagio

sublime de mi tempo, en lo que siento.

Sea en mis brazos nota y sentimiento,

sea igual partitura y temporal.

 

Sea el acto esperado por mi boca,

eleve sus encantos, su virtud, su ideal.

Sea en mí la asunción, la más bella tonada.

 

Sea adagio y allegro, y mi amada…

¡Sea en mí el encanto que sofoca!