GLORIAS
En mayo
resisten las glorias del amanecer.
Se abren como ilusiones
sobre las pestañas.
Dicen que duran
como dura el suspiro de un enamorado
nada más eso
pero permanecen
cuando los árboles más
altos sueltan sus besos al invierno.
En el camino de regreso
vemos como las flores siguen
abiertas como trofeos olvidados
entre las paredes del bosque.
Entonces puede ser la tarde
el frío o las murallas
y el guía es el amor
trepando por las heridas.
Las enredaderas se propagan entre los
abrazos y un ángel musical
hace sonar la trompeta del equilibrio
para volver a creer.
AUTOR
Sergio Alejandro Cortéz
Villa Dolores, Córdoba, Argentina.