I.
golpea repetidas veces
su cabeza
en la desnuda muralla del patio frontal
(que a esas alturas venía a ser
como el muro de los lamentos)
para luego alzar la vista
lo más humanamente posible
y exclamar con pedante resignación: es
obra de dios!
otra inédita obra de dios!
II.
caperucita rastreaba
sigilosamente las huellas
que iba dejando el patético lobo
mientras al otro lado de la calle
(quise decir del bosque)
se tejía una historia medio rara entre
hansel, gretel
y un pervertido señor K.
…...............