Serás ausencia mientras proyectemos distancias, y que importa del después cuando la rosa esbelta escarlata empalidece de agonía. Cómo espada bruñida en la roca apenas pude sacar el dolor la sangre derramada en penas vertidas en los ojos...y dime qué importa del después cuando el dolor irrumpe en dos almas mudas; que se buscan como ciegos sin poder hallar esos labios que invocan los besos esquivos. Y que importa del después cuando todo es profano y consumado al fin...