Àmame, así como se ama en la selva, con garras. Muerde el cuerpo hasta lo profundo de su ser. Defiende con locura nuestro nicho de enamorados .
Duerme frente a mí, desviste la noche, arráncale pedazo a pedazo cada gota de sudor y con tu lengua, hazme gemir.
Àmame así, como perro enamorado, fiel a su dueño. En cada pausa de la alcoba derrocha todo tu amor salvaje.
Àmame así, con tu arma poderosa. Desliza por mi cuerpo tus manos, deja que me desangre. Defiende con finura la pasión.
Destruye mis oídos con deseos inapropiados, pide más y más, quiero sacearme hasta la lividez.
Déjame acariciar tu espalda y llegar al rincón preferido de mis labios. ¡No detengas tus uñas afiladas!.
Muéstrame así, en tus manos como un trofeo preciado ante la muchedumbre. Defiende con ternura el amor.
Àmame así, como pantera en celo, como serpiente que abraza a su presa. Aúlla de deseo bajo la luna.
¡Àmame así, amor!