Andiuz

In memoriam, Ermelinda

La muerte o la vida

No se sabe muy bien

Cuál es cada cual;

Penosa agonía de meses

Y de años y de lustros

Sonando en la casa familiar…

 

“Sonríe, madre,

A ver… a ver…”

Y con esfuerzo levantabas

La cabecita con una sonrisa

En la cara.



“Aquí estamos “ querías decir…

“No hay más.

Me atrapa la muerte

Y la vida me pide una sonrisa,

Pero no hay más…”



El domingo día 11 de septiembre



Nos pasó recado la muerte

Pero estábamos de fiestas  

Y no nos lo creíamos.

 

Por la tarde,

Te cogí las manos un buen rato

No sabía por qué inextricable intuición

Pensaba que la muerte rondaba cerca

 

Y quise darte la mano,

Por si acaso, para que no te sintieras sola.

Quién me iba a decir, madre,

Que aquellas manos húmedas,

De sudor frío, se estaban

Definitivamente despidiendo.



Y llegó el momento de la transfiguración.

Y te vi mejorada con un inusual brillo en tus ojos,

Juvenil, hermoso, húmedo… primaveral…

Me pareció aquello un regalo



En la tarde de fiestas

Con tus manos entre las mías

Y el sudor frío confundiéndome

Y dejándome fría el alma.

 

Podía pensar que la muerte

Estaba cerca, tanto tiempo rondando

Nuestra casa, madre, tanto tiempo…

Chupándote la vida, robándote el aliento,

Devorando lentamente tu cuerpo,

Deteriorando tu mente

Con un garrote vil pero lento,

Muy lento, poco a poco,

La muerte te había ido amordazando

y te había ido substrayendo

La memoria,

después la palabra,

y finalmente el movimiento.

Y cuando te tiene presa y sometida,

Te mira y te deja indefensa

Para espetarte y espetarnos

Con mirada vengativa: serás un despojo;

Pero, entre tanto, tomo tus manos

Porque algo me dice que hay que rezar

Y que hay que acompañarte en esos momentos

De tan dura soledad.

Noto que el sudor frío te empapa el cuerpo

Y que tus ojos son primaverales,

 

En el último recorrido que me haces de arriba abajo.

No me lo podía imaginar.

 

Después yacías muerta, con gesto sereno,

Ya no hacían falta tranquilizantes,

Estabas guapa

y tu hijo te dio en la frente un beso.