¿Quieres que nuestro amor se vuelva eterno,
sublime y sideral?
¡Bríndale con tu cuerpo y tus caricias
el delirio sin par!
¿Quieres que disfrutemos la tormenta
de una pasión febril?
¡Cúbrelo con las mieles de tus besos
que invitan a vivir!
¿Quieres que nuestro lecho sea el ara
del culto al Dios Amor?
¡Dadme de tus encantos ese fuego
con tu brillo de sol!
¿Piensas dejar escrito en tu memoria
de la ilusión rondel?
¡Haz que de tus orgasmos surjan versos
con himnos de placer!
Autor: Aníbal Rodríguez.