Hubo un tiempo de progresos,
de ilusiones y de avances,
donde cabían romances
y hasta sobraban los besos.
Los males eran confesos
al aflorar los valores,
e incluso dulces folklores
que llamaban a la puerta,
dejaban su magia cierta
con sus voces y colores.
Y cuentan los ancianitos
con sus sonrisas y llantos,
que los buenos adelantos
caminaban despacito.
El cuadre, cosa de ritos
entre muchos desiguales,
y no existían manuales
para un mundo digital,
donde el viejo santoral
quedó en recuerdos rurales.
Hubo un tiempo, dicen ellos,
donde el respeto y mesuras
se ataban en las cinturas
como medallas en cuellos.
Lindos tiempos dicen ellos,
tiempos que no han de volver,
y aquellos que han de nacer
vivirán entre señuelos,
donde sus únicos cielos
serán, comprar y vender.
Lo artificial se aproxima,
el sentir no va de frente
y en devenir indecente,
será un recuerdo este clima.
No ha estima en la autoestima,
no hay amor sin los honores,
no hay favor si no hay favores,
sin prestancia no hay paciencia,
sin sentido no hay decencia,
sin honor, ¿vendrán amores?
Hubo un tiempo sin progresos
que anulaban la certeza
y cambiaban la belleza
por los más feos sucesos..
Siento temblor en los huesos
pues es presente algo frío.
Dime niña, en ti confío,
¿se quedará la canción
en guarda de confesión?
En este tiempo sonrío..
Jhet