Son las ocho y la noche es inminente;
y se asoma y se econde pero sin dejar de dar pasitos hacia mí...
Multiplicadora de algoritmos infinitos y en bucle, evoca ruidos con disfraz de silencio...
No soy puma ni serpiente, soy solitario y ágil en llanto y torpe en mis aciertos...
Pero la noche me atraca, me roba la cartera, me viola.
Mas yo le agarro las tetas al mundo
y fecundo mi bienestar desde las entrañas de La Tierra.
RBP (21/8/24 - 20:43)