EndimiĆ³n

No vuelvas

Ojalá te vayas y no vuelvas jamás, ojalá te lleves contigo tu aroma, ese que sigue persiguiéndome y que no me deja en paz, el mismo que me acosa por calles, parques, casas, oficinas y demas, apareciéndose sin que ni siquiera estés ahí. Te vas, y ojalá contigo se vayan las risas y tu voz, esa que escucho en las noches y me piden que vaya, mienten, engañan, duelen, ni siquiera estás aquí. Vete y empaca en la maleta los tres besos, tus dos manos frías, el libro, mis cuatro abrazos y el sin fin de poemas que en tu nombre escribí, lleva también los recuerdos, los pasos que practicamos, las tardes que hablamos, los sueños que te conte, talvez algún día, melacólica, quieras recordar, talvez jamas. Ya vete y no vuelvas, no me escribas, no me llames, no me pienses, no me menciones, no me digas que te costara porque ni siquiera has de llorar, me olvidaras si no es que ya ha pasado, asi que por favor, por mí, no vuelvas, jamás, que te seguiré extrañando y defraudándome a mi mismo si dices volver a la ciudad y yo acudo a ti a velocidad, no vuelvas, jamás y si lo haces no me busques, que una segunda despedida no podría soportar, no vuelvas, por favor, jamás.