Creen que es fácil de aguantar,
esta vida de crueldad,
y no aceptan su realidad,
todos ellos quieren acabar,
con todos los demás,
que no quieren dejar su humanidad.
Ya no se puede respirar,
en este ambiente de crueldad,
y quieren matarme a mi
porque quiero salir de aquí,
de este lugar,
que no me da felicidad.
Donde te quieren ver muerto,
ni si quiera el dialecto,
de su propia comunidad,
nos podrá ayudar.
Nada nos salvara,
de la inminente muerte,
ni siquiera la suerte.
El suelo es ajeno,
la tierra no reconoce tus pasos,
y los rostros se borran
como si nunca hubieras estado,
como si tu existencia fuera un sueño,
en un mundo que te niega hasta el amanecer.