Las flores tienen su tiempo, el corazón su palpitar,
mi alma besa tus flores y en tu perfume se envuelven...
la luna brilla con majestuosidad incomparable
y se refleja silenciosa en el mar de mi alma, que lo envuelve.
Lluvia de pensamientos pasan por mi mente al susurrar tu nombre
como musica que advierte a mis oídos nunca olvidarte,
haciéndome compreder, después de hacerte mía
que tu nombre y mi nombre paralelos serán para siempre.
No hay mayor alegría en mi pecho, que tu canción canta
como cantan las aves en los árboles,
anunciando nuevas emosiones, sensaciones,
tarareando nuestro amor, como ordenando entrelazarse.
No deja de enternecerme ese momento grato
cuando cojídos de las manos, con el mar presente,
nos decíamos mutuamente fortalecer nuestro entorno
que es nuestro nido, nuestro amor fuerte.
No dejo de pensarte, pensarte dos veces,
am y pm, como las horas del día
y todos los días de la semana
y hasta los meses del año, que por mi alma pasan.
Así te cuído, como esa flor delicada que eso merece,
respetando todo el tiempo tu venebolencia fuerte,
como fuente de aguas cristalinas, que cáen de un río
bañando con rocío en las orillas, el más hermoso de los cesped.
mnap.8312024.h.2p.s.By:Jorge L. Casado