jvnavarro

DIARIO DE VERANO LXIII (SOLO EL MAR)

Cada vez que miro el mar
me veo navegando por él
sin moverme de la arena
y sin menear un dedo.
 
Que bonito es llenarse  de mar
y verse uno huyendo
con su amor 
camino de esos puertos
donde a los enamorados se les recibe
con coronas de flores y besos.
 
Me he visto en sueños
 grumete en el ballenero Ahab,
 despellejando cetáceos,
Moby Dick era el reto
y el capitán Akab mi tormento.
 
He sido de todo, 
en todos mis tiempos, 
me sentí marinero en un velero,
surcando las aguas 
para cuando se daba viento,
 
He viajado sin saberlo
 en cruceros de esos
que sobre el mar son 
una especie de edificios 
con sus balconadas abiertas 
al firmamento.
 
El mar me ha inspirado siempre
buenos recuerdos.
 
No pienso en los océanos
mis recuerdos son 
para este Mediterráneo
ya camposanto,
 ya especie de lugar de cruce,
con millones de turistas 
surcando sus aguas 
o moviéndose por el cielo.
 
Contemplo con envidia 
 un paquebote,
ayer
sobre el agua quieto,
a esas horas 
en que la noche entra
y en la bahía 
donde se produce este hecho,
sale la luna 
para convertir el momento,
en un cuadro de luces lleno,
 con ese embeleso 
que solo se produce
 para cuando te gusta lo que ves
y sientes algo especial 
en el interior de tu cuerpo.
 
El mar es un olvido;
el mar es una canción;
el mar es un labio;
el mar es un amante;
el mar es un deseo;
 el mar es un verso;
el mar es una mano;
el mar es un espejo.
 
El mar es el reflejo de una gaviota
que vuela lejos;
el mar es el recuerdo
para con los que mueren en sus adentros;
el mar es un trozo de luna
que se cayó del cielo
 en una noche de tormentos;
el mar son las crines de un caballo
que trota desde siempre
trayendo olas 
para que con ellas juguemos;
el mar es eso que yo quiero;
lo que tu amas,
de todo un poco
es un cuerpo rubio y otro muy moreno
 
Todo esto ya y desde ahora
forma parte
de ese ya conglomerado de expresiones
que se vienen repitiendo
desde que la vida sobre la tierra
es un hecho cierto.
 
Hablando del mar
seguro que es cierto
que hay millones de frases 
que sin saberlo
en algún poema hemos puesto:
 
Mar de vida
y mar de silencios,
mar adentro,
mar y cielo,
mar de amores,
mar de marineros,
mar de pescadores,
mar de encuentros,
mar de muertos.
 
Y es que el mar es de los poetas
una especie de tintero
del que extraer la tinta
para escribir los versos.