(Soneto con lipograma, excluyendo la vocal \"a\")
¿Cómo te digo que te necesito?
Que, necesito el fuego de tus besos,
el licor, el jerez de tus excesos,
ese perfume dulce y exquisito
de tu verso, que es el monolito
perenne de sentires inconfesos.
Seden, te necesito en mis defesos
mechones, en el ojo de mi escrito.
¿Cómo te digo?, Luz de mis vergeles,
si el índigo me dice que eres sol,
que eres oro y el numen del carmín.
Hoy, ¡ven!, que necesito de tus mieles,
quiero ser consumido en tu crisol…
Quiero ser el orgullo de tu fin.