Llegará el día que te veré caminar con
pasos lentos, como lo hago yo y, te reías
de mí, no sé que te pasó; hoy veo en ti
que no eres la mujer que presumías,
hasta como tu querido tiene, según
tú, plata a monton; aunque lo tenga
solo mi Dios puede resolver tu mal.
Tener fé en él, hasta siempre rezar una
plegaria que te tenga con buena salud,
y ser bondadosa con quién tienes a tu
alrededor, cosa que en tí no hay
Siempre le ruego a mi Dios que cure
los enfermos de raras enfermedades
que afectan a l
a humanidad.