Entiendo que debemos redescubrir las cosas normales. El canto secillo de una buena amistad. Unas flores bonitas para alguien que está enfermo y se las merece como persona. Una puerta abierta a la espera de recibir gratas noticias. Una mesa bien dispuesta y acogedora con la armonía necesaria para disfrutar de la relación humana. Un apretón de manos. Una sorisa agradable y sobre todo sincera. El gratificante dibujo de un niño realizado con pasión y cariño. Una flor que se abre. El canto o trino de un pájaro que se encuentra enamorado en plena primavera. Una hilera de álamos bién dispuestos. Un riachuelo.Una montaña...La vida se torna una fiesta cuando sabemos disfrutar de ella, y de las muchas cosas que son normales cada día.