La Bestia
La bestia me llegó, pero qué bestia,
mas traía consigo mil enseres.
Me arremetió en pasión sin la molestia,
de ver si con su ultraje dio placeres.
Oh, mujer, tu placer me sacó el quicio,
ay, bestia, de qué infierno te soltaron,
trae otra vez de noche tu suplicio,
y exprime del alma, do otras fallaron.
Cuando simples humanos más te fallan,
vuélvete buen hurgón en el averno.
Y escoge entre las bestias que más callan,
aquella que te ofrezca sexo eterno.
Entre todas las cargas de la vida,
siendo la más liviana nuestra muerte,
sentimos deja el alma, que derruida,
flota en un universo gris, inerte.
Ricky Arbenz
4 de Agosto 2024
Chicago