Los miedos del alma son las cadenas invisibles que sujetan a la sociedad, impidiendo su crecimiento y libertad.
A través del temor al cambio y la opresión de la duda, las personas se conforman con estructuras que las esclavizan.
Esta sumisión colectiva, arraigada en inseguridades profundas, perpetúa sistemas de desigualdad y control.
La emancipación no se alcanza solo con la lucha externa, sino con la liberación interior de esas sombras. ¿Cómo podemos romper las cadenas invisibles que nos atan a la servidumbre del miedo?