Querida dama:
Nunca se sabe que pasara mañana,
si hoy es un día y mañana la semblanza de nuestros procesos,
querida dama hazme saber si hoy se puede triunfar, si hoy seré yo el final,
esmero cada día mis esfuerzos de persona en el sendero místico, de ser lo mejor;
Pero no se preocupen de ser diferente que el resto, de ser decididos para un buen camino, somos la naturaleza honrada,
no esperemos ser ruin, el odio no llevara consigo a ningún lado, vivimos la vida a tope querida dama, por eso le pregunto:
¿Si hoy seré yo el final? no sera para mal, sino para bien, déjeme expresarme con solemne educación, cada verso de mi oración;
de aportarle mi corazón en el frasco místico, que llevara pedacitos buen aventurados de nostalgias dichas,
si, me exijo mucho cada día de ser lo mejor querida dama, pero no quisiera ser el centro de atención de la envidia, el odio y el rechazo;.
Esta carta no es para los que esperamos ser recibidos para ser mejores, soy yo hablándome cada día en mis oraciones, esperando una respuesta de mi subconsciente.
¿Si hoy seré yo el final, solo con aprobar?