Marco Gutierrez Jaldin

\"La isla de la sombra\"

Isla de la Sombra
 
Un cielo de zafiro y grana, una bruma bullente e infecunda, la Isla de la Sombra, que marchita la belleza con su aliento de muerte.
Las palmeras se inclinan como espectros, sus hojas secas susurran secretos de un pasado agonizante.
La arena se tiñe de rojo, el mar se vuelve un espejo de la sangre derramada.
 
Los niños enloquecen al aroma de un éxtasis fugaz, sus risas se vuelven aullidos, sus ojos se desorbitan,
mientras las niñas, con alas rotas, se arrastran por la tierra, sus sueños se desintegran en polvo.
Susurros de inocentes infantes… se desvanecen al son de la lujuria… de mentes retorcidas,
que bajo un cielo perdido e idolotrado… solo son leyendas…
 
Isla de la Sombra, murmuran con la mirada perdida e inquietante,
almas torturadas a cumplir fantasías de “viejos” caprichos, sus manos se aferran con una furia salvaje,
sus ojos brillan con un fuego enfermizo.
Miedo a morir en el intento… luchan por aguantar un dolor menguante… que al final del día se intensifica con tal fuerza…
que hasta el ser más impuro se horroriza por tanta crueldad…
 
El cielo se tiñe de púrpura, pero la belleza se convierte en una máscara para el horror que se oculta en el corazón de la isla.
Los pájaros de plumas negras revolotean sobre las ruinas, sus cantos desgarradores resuenan en el silencio.
La Isla de la Sombra, un lugar donde la inocencia se desgarra y la lujuria se alimenta de la desesperación.