edgardo vilches

ESPACIO ABIERTO

Entre las extendidas rencillas de cada día

Un río de furia alimenta las cimas que van al mar

Las corrientes internas de los latidos del corazón

Bombean oxigeno hasta las empinadas sombras

Que va arrastrando el hormigueo frecuente de las sin razones.

 

Hay una turba de sentimientos que corta el aire con frío

Y el sonido de la ciudad acompasa las horas póstumas.

Hay una escena difícil de explicar y viajan hacia el horizonte

Los últimos pasos de un ser que no dijo adiós…

 

Los trenes de aliento se descargan en el andén vacío

Y una luz inunda los pensamientos con un dolor exasperante.

Después de eso, arboles mecen una luna llena

Y las estrellas se aparean, en una orgia de avistamientos astronómicos.