Creer… creer en algo bueno,
recrear con fe las sombras.
Creer… creer en algo bueno
en el balcón de tu sonrisa que trae alivio.
Creer… creer en algo bueno
con la respuesta delgada
perfilando el criterio.
Una dirección hacia la forma
que amasa tus manos y
remueve huertas de lo bueno.
Creer… creer en ti,
en tu océano de los tres
en el líquido amniótico
en los tres del abrazo de este sol pleno
que recorremos conmovidos.
Creer… creer en la emoción
donde vibra la fantasía trémula
en la posibilidad trémula del hombre
la región trémula y vacilante del perfume
el hogar vertido de tu presencia.
Creer… creer en la afección y
el estímulo de lo bueno
la sencilla razón de las lágrimas
el sabor de las cosas.
Valoro que las cosas sepan a realidades
que las realidades quepan en nosotros
que viertan hierbas desconocidas en la pava
que sepan de realidades los neurorreceptores
que la suerte sepa a agua que no sea insípida
porque nunca el agua es insípida.
Creer… creer en algo bueno.