A. García de Verriér

Al Dios del Amor.

Eres diablo parido, 
Eres vicioso pudiente, 
Eres ácaro avaro, garrapata demente. 
Eres monstruo con rienda, esclavista omnisciente. 
Eres percepción maldita:
De ti son consecuencias, como Látigos, las palabras, 
De grilletes las miradas, 
De cadenas las súplicas, las sumiciones.
Como condenados putos caemos ante ti,
postrados cual adicto orgulloso. 
Pues fieles somos de tus besos, 
Fieles somos de tu culpa, 
De tu contagiosa sentencia...