Lourdes Aguilar

AMAPOLA

Amo a tu cuerpo de bronco alazán
el movimiento de tus manos con la reata
adoro recorrer los cerros en tu montura
reclinada en tu pecho escuchando tus latidos
que hablan de la tierra nuestra tan querida
la que desde pequeños nos cobija y alimenta 

Flanqueada por tus brazos firmes con la rienda
deseo tus bigotes cosquilleando en mis orejas
llegar donde se alzan imponentes los magueyes
y reposar solitarios en la cañada
donde el río pasa cantando sones

Adoro el sombrero que protege tus cabeza
mientras tu rostro se proyecta en lo infinito
adoro cuando en algún álgido momento
sutilmente se desvanece ese marasmo
y me buscan tus manos y tus labios
tus manos que doman y que excitan
tus labios que inician besos trémulos
como degustando la morbidez de una fruta

Adoro ese rodar entre la hierba seca
prendida e incendiada con las caricias
amo ese retumbar del suelo que escucho
como estampida incontrolable de ganado
como el crepitar de fuego arrasando la llanura

Adoro cuando la augusta noche nos sorprende
con su cómplice millar de ojos en el paraje 
amo tu mirada complacida cuando me inclino
y mis cabellos palpas como una aureola
llamándome extasiado linda amapola