Recuerdas Margarita
cuando nos vimos por primera vez,
entonces muestras miradas se ensamblaron
y algo extraño sentimos,
desde entonces supe que había algo especial,
que había una atracción tan poderosa que nos hacía vibrar,
que nuestros latidos se fundían en un solo corazón
y nuestros cuerpos se deseaban de un modo tan estrecho
que un solo cuerpo quedaría ardiendo en amor,
¿cómo no ser romántico contigo?
Si eres la mujer que más admiro.
Siempre te estoy buscando,
pero nunca me atrevo a llamarte,
es mi extraño comportamiento infantil.
No puedo evitar estar pensando en ti todo el día,
supongo que estarás harto de mi comportamiento,
yo te escribo, aunque piense que estoy bloqueado
y todo lo que te escribo quedara en el limbo,
tal vez sea un desahogo a esta locura.