Freddy Kalvo

Un bien libertador

¿Cómo miras sin ver nada,

cómo escuchas sin oír

o has dejado de sentir,

en lo más hondo del alma?

Y pregunto: ¿Por qué callas

la injusticia que tú miras;

por qué vives de mentiras

que pululan por doquier;

tienes miedo al vil poder,

que en silencio lo transpiras?

 

¿Cómo vives sin mirar

la injusticia y lo que ocurre?

¡Cuánto mal siempre discurre...!

¿Eso no te hace pensar?

Y la historia ha de juzgar,

el silencio pernicioso

en un mundo tan nuboso

donde el pobre, maltratado,

vive siempre sojuzgado

su calvario doloroso.

 

¿Y cómo hablas sin hablar

del que sufre y del que llora

cuando la tristeza aflora

cada día al despertar?

¿Quién su canto ha de cantar

a favor del desvalido?

¿Quién, si nunca habrá sentido,

el dolor de la pobreza

y el afán de la tristeza

cuando el alma ha carcomido?

 

Los discursos dicen mucho

tanto o más que lo que escribo,

pero siempre yo percibo,

que más de lo mismo escucho.

¿Y el pueblo? ¡Sigue flacucho,

los discursos no alimentan!

Las mentiras más atentan

contra la verdad, la vida,

porque sangra más la herida

y las venas se revientan.

 

¿Cómo miras sin ver nada,

cómo escuchas sin oír

o has dejado de sentir,

en lo más hondo del alma?

¡Ah mi pueblo! Lucha y canta,

canta y lucha sin temor

que quien lucha con fervor

nuevos tiempos siempre augura.

«La verdad siempre procura,

que es un bien libertador...»