Andiuz

Contra el feminicidio

 

El crimen fue en Granada. Otra vez en Granada…

Lo pregonan los almuecines entre lágrimas

desde los minaretes más altos…

Trinidad. Tres detonaciones y la muerte absurda.

Tres tiempos: el de la felicidad, el del horror y el de la muerte.

Calle Camino del Visillo, nº 15,de Albuñol:

ríos de visillos empapados de sangre clamando justicia…

¿Qué has hecho, Ramón? ¿Cuando relinchan los caballos

desbocados solo queda tu cobardía trágica?

Tres detonaciones, Trinidad. Tres.

Dónde quedaron los abrazos, dónde las flores, dónde los “te quiero”…

Llegó el primer hijo; con las rosas vinieron las espinas…

Nació el segundo, corrió el champán; ahora queda embriaguez…

El tercer vástago era jazmín con perfume pero hoy es blancura marchita…

El cuarto parecía felicidad pero era sonrisa subyugada…

Hoy amargura…

Y Ramón dijo: cada noche pondrás rosas rojas en mi lecho

y la música de la sumisión:porque eres mía para siempre…

No podías imaginar, Trini, el monstruo con el que yacías:

tu delito fue ser mujer y querer ser libre…

El crimen fue en Granada. Otra vez en Granada.

Tres detonaciones, Trinidad.

Y el retrato de bodas se borró entre la sangre,

sobre una fuente donde llora el agua…

Callarán las víctimas. Qué les van a contar a los niños…Callarán.

Pero no el pueblo. Nunca callarán los poetas.

¡Pobre Trinidad!  ¡En su Granada!