Nos dijimos adiós hace un tiempo ya lejano
cuando fuimos tontos y no supimos entender
que nuestra vida era un volcán en erupción
que nuestro corazón ardía con una flama
que nunca supimos entender ni alimentar
Nos dejamos con torrentes de lágrimas
con un nudo en la garganta y sin hablar
de las lamentos y gritos que nuestra alma
lanzaba al viento acompañados de dolor
por haber dejado pasar tantos años juntos
Los recuerdos son constantes en la memoria
nos dicen al paso del tiempo cuanto quedó
guardado en el cajón del solitario corazón
que vuelve a traernos a cada minuto aquello
que se extraña, pero que se quedó maltrecho
por las palabras sin sentido y con ausencia
de un toque de cariño o migajas de ternura
Las noches son consejeras incondicionales
que te llevan a reflexionar muchos momentos
con destellos que acompañan los detalles fríos
o sintiendo el fuego de la calidez añorada
que hoy no está junto a nuestra almohada
Comprender nuestros momentos es aquello
que nos guía con la verdad de nuestra vida
comprender nuestro sentir y nuestra pasión
es lo que debimos compartir con otra alma
que esperaba sonreír y tener las esperanzas
de llegar a un horizonte lejano en el tiempo
con hilos de plata y líneas en el rostro serio
He guardado mis memorias desde entonces
he guardado mis reproches y mis aciertos
he guardado mis deseos añorados y lejanos
he guardado mis deseos de sentir nuevamente
el fuego en el corazón porque solo puedo sentir
el arrebato lleno de inspiración para escribir
los sentimientos que me acompañan desde ayer
y que me recuerdan que sigo vivo en mis días
que entran en el otoño lleno de color y brisa
cálida que me lleva al camino donde volteo
y recuerdo que aún existen motivos para vivir
que la vida regala generosamente sin explicación
Arturo Eduardo Gámez Torres
Baja California, México
\"Entender el sentimiento del alma y los secretos del corazón ...\"
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