EL SAUCO DE LOS RECUERDOS
En las cumbres de los Andes,
donde susurra la brisa al alma,
un viejo sauco guarda mis sueños,
sus ramas esconden secretos de calma.
Recuerdos de tardes doradas,
un amor que floreció en el viento,
besos que desnudaron mi esencia,
cada instante, un eterno aliento.
La niñez se apaga en sus labios,
cada beso, un adiós a la pureza,
la pasión, un río caudaloso,
arrastrando sombras de tristeza.
Escucha el eco de lo vivido,
un susurro que nunca se apaga,
un fragmento de luz en la memoria,
anhelando días que el tiempo desgarra.
En la orilla de sueños marchitos,
donde la risa solía habitar,
un amor antiguo murmura suave,
invita al alma a soñar y recordar.
Aunque el tiempo robe mi infancia,
y el amor me lleve a nuevas dimensiones,
conservo un suspiro, un instante,
un eco de dulces emociones.
En el viejo sauco encuentro abrigo,
cobijo mis penas y alegrías;
cada hoja, un reflejo del tiempo,
cada sombra, un recuerdo de días.
Valoro el amor que allí floreció,
bajo el cielo andino, en su esplendor.
El niño que fui ya se ha marchado,
dejo un corazón lleno de ardor.
Autor: LUÍS APAZA H. Alías: Corazón Bardo
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