Te he susurrado al oido,
te quiero mientras dormías,
no sé si lo escucharías,
pero tú me has sonreído.
Aquel rostro angelical,
súbitamente despierta,
y apenas sin darme cuenta,
se muestra muy sensual.
Con una tierna mirada,
ella me regala un beso,
después de decir confieso
que ahora contigo soñaba.
Que simple fue ese momento,
y cuanto amor atesora
me acuerdo de él cada hora,
pues fue puro sentimiento.
Hay un poco de locura
en toda nuestra pasión,
vivimos esa ilusión
como si fuera aventura.
Classman