“Sentí la lenta mirada de tus manos,
supe así lo que era tener en la piel un astro
y el verso me llevó por la ruta del deseo”-Tú dijiste…
…Y mi poema habló en lenguaje de señas.
Señaló tus ojos y tu mirada inundó mi rostro.
Señaló tus labios y sorbí la miel en sus comisuras.
Señaló tu cuello y encontré la pasión en ello.
Señaló tus pechos y tus colinas fueron paisaje.
Señaló tu cintura y mis manos la llevaron contra mí…
Y desde allí, no respondí más por nosotros:
Fuimos toda entrega, toda pasión, todo deseo.
Alma Erótica
José Luis Agurto Zepeda
Managua- Nicaragua
05/09/24