Enrique Dintrans A.

EL COCODRILO

EL COCODRILO 

Un cocodrilo dormía  
junto a la orilla del río
Y la piraña Sofía    
lo despertó con tal brío 
que sus grandes y oscuros ojos
el cocodrilo movía. 

Así la piraña Sofía 
al son de una vieja trompeta
cantó con la rana Julieta 
la canción que tanto quería
el viejo pulpo Martín
mientras tocaba el violín. 

Y las gaviotas vinieron 
de tanto alboroto escuchar 
la voz del gran cocodrilo
sus grandes hazañas contar: 

¡Advierto que por mi boca 
soy cocodrilo dragón!
¿no ves, Piraña Sofía 
que mi canción se disloca
cuando Martín y Julieta 
en música torpe y loca,
invocan un nubarrón?

Entonces el pulpo Martín 
molesto detiene el violín 
mientras las bellas gaviotas
consuelan a la rana Julieta 
que no para de llorar. 
¿Y por qué te enojas tanto,
cocodrilo del espanto?

Insisto se callen todos 
pues viene un gran nubarrón
el cielo se ha puesto muy negro
y no hay conjuro ni canción 
que calme mi furia y pasión 
Yo soy el trueno y el rayo
¡Soy cocodrilo dragón!  

E.D.A