Como bebía mucho por borrar tu amor,
por el daño que me hiciste porque,
no quería seguir conmigo,
pero aprendí
que no se puede meter al vicio, sólo
porque no se puede obligar a un personaje,
a que nos ame obligado.
Una noche desperté soñando que tenía otro querer. En ese
momento me prometí no seguir tus pasos.
Hoy soy un hombre sin vicio y, te veo
en lo mismo que yo pasé.
No sé si te hicieron lo mismo que me causaste
a mí.
Estás a tiempo para tomar el
camino correcto, como lo hice yo.
Ahora soy felíz gracias a mi Dios,
porque me hizo tomar esa decisión.