Mauro Enrique Lopez Z.

Cómo me alegro

Cómo me alegro que ya conmigo 

no tienes nada.

 Fué lo mejor que me allá pasado;

 que contigo no tenía 

una vida en paz; con tus celos y mezquina. 

Que no querías compartir un bocado, 

o cuando traía algo de mi trabajo; eso 

me enojaba porque, prefería que se dañarán 

las cosas que compartir.

 Mi abuelita me decía siempre:

mijo comparta lo que trae,

 que mi Dios se lo recompensa. 

Hoy en día no me falta el pan en la 

mesa porque, las bendiciones siempre 

me llegan y, soy felíz con mi pobreza. 

Hasta tú llevas algo pero, a mi lado 

ya no cabes en casa.

 Soy felíz porque siempre tengo trabajo.