Emilio Barrios

ConfesiĆ³n de amor no correspondido

No soy un bandido, tampoco un mendigo que por tu amor debo padecer un castigo, no puede dejar de amarte, no, no es sencillo, observa mis ojos, mira en su interior ¿no vez que pide auxilio?, nada sin ti es bonito más aún sabiendo que no soy correspondido, ya no se que hacer en verdad te lo digo, si quieres me arrodillo, agoniza mis emociones a la vez que camino por un callejón oscuro sin motivos, sin sentido, te necesito en mi vida como no te das cuenta de lo que te pido, quiero una oportunidad, un momento de tu tiempo para demostrarte que simplemente tus besos preciso para ser feliz, no  soy egoísta, no es fácil decir, la ilusión a cuestas y un sentimiento febril recorriendo mis venas no es vivir, las palabras no emergen cuando mi voz quebrada se ahoga en mi garganta, ansió que veas lo que llevo dentro de mi, es un amor que a punto de explotar esta por ti, eres mi primavera, eres mi verano, más no mi otoño ni mi invierno porque no me gusta el fresco ni el frio, de manera que imagino seria tu piel si te abrazara ¡cariño!, quiero percibir un afecto cálido como el verano de un anciano, como el viaje a casa de un preso recién liberado, al despertar cada mañana lo primero que viene a mi mente es tu nombre, la forma de tu rostro, tu cabello brillante y tu cuerpo hermoso, no quiero parecer lujurioso, no es mi intención, es solo la emoción que no la controlo, si supieras que sufro en silencio como un enfermo que no quiere que sepan que se esta muriendo, me entenderías, dime que puedo hacer para conquistar tu amor y así salir de este encierro en este infierno a causa de mi desconsuelo por un amor no correspondido.