Joël Keffa

Sole-dad

 

De aquí puedo oler tu perfume,

necesaria en el silencio

en esas horas frágiles

cuando me hablas y cuando callas.

 

No sé si hay quien como tú

que mejor me fue tan fiel y leal

que mejor me amó de verdad

en esos «caminos de vida».

 

Algo celosa cuando viene otra

posesiva verdad y muy honesta

cuando no la quieres

junto a mí.

 

¿Qué no daría por ti, S-o-l-e-d-a-¿

Hiciste de mí un extraño,

un doble consigo mismo

en ese ciclo del olvido.

 

No sé si eres libertad

cuando nadie te espera,

o si eres madurez

cuando se sabe lo que eres.

 

Tal vez, tú fuiste lo todo

lejos del mundo, te miro

y entre ellos, te extraño

es todo un pacto semiótico.

 

Tal vez porque ya no soy como antes

o, a lo mejor, como antes, ya no soy.

Es como encerrarme y abrirme

a una versión de ti que copia no sea.

 

Droh Joël Arnauld Keffa