Absolución
Mi cielo necesito un cura
que me perdone el pecado
de haberme enamorado
de tu linda cara y tu figura,
no cabrá ni en mi sepultura
aquel amor tan grande
que no fue importante,
una flor seca en el desierto
que no florecio en mi huerto,
eso fue lo que me enseñaste.
Que no debí ser comunista,
que no te parecí humano
preferiendome ser vegano,
no te importó lo detallista
o que fuera algo altruista
pero llegarás a envejecer
sin olvidar cada atardecer,
sin olvidar lo que te dí
aquellas noches de abril
antes de cada amanecer.