Su alba difumino, perdido en la complejidad de la vida nocturna
Desde entonces la luna le alumbra firme al borde de la penumbra
Sin rumbo fijo trata de encontrarse a si mismo y observa
A la masa
En una noche de livido se le quito lo timido sembrando la semilla en el
Si pudiera estar un minuto a su lado con ella viva
Le agradecería por enseñarle el valor de la vida
Seducido por una mirada que lo encontró para dejarlo perdido
Sirenas cantan en las esquinas naufragando tripulantes
Escuchando las voces, susurros de la calle y sus batallas
A los 17 miro a la muerte demostrando sus agallas
Resplandences mi esencia, eres ciencia, creas conciencia con el alba de tu esencia.