Hay un segundo muerto
a lo largo de mi espalda
una escala delgada
en vertebras laceradas.
Pagando el prodigo precio del silencio.
Hay soledad y un cielo puerco
devorandose las estrellas nombre por nombre
inutilmente,ciegamente,lentamente
cuando nada es cierto.
Siento caer fuera de mis sienes
ahogarme tibiamente en vuelo
para poder decirle
Tengo miedo
¡ Tengo miedo.....!
Este interminable descenso que no entiendo
Este angustiante latido que no contengo
Este terrible dolor que no comprendo.
Siento mucho estar frente a ti
burlandome de tu espejo.
Callarme la mirada
y de un grito decir Lo Siento.
Lo siento
estoy muerto del sueño que haye en tu estatua
y de tu boca fatigada
cuando se atreven a sonrisas.
Malgastadas,perpetuas,dormidas.
Lo siento
desde la nota fugitiva que espasma caricias.
Si me sabes,
despierta el cuerpo yerto
despierta y envuelvete con mi olor a desierto.
Si el sueño te abandona
pretende ser mi pensamiento.
Y si
por un segundo muerto
perdemos el aliento
desde ya te digo:
Lo Siento.
Lo Siento.