JAVIER SOLIS

TE DEJÉ PARTIR

La tarde estaba triste, lloraba

las aves no cantaban, gemían

los árboles en silencio, suspiraban

todo parecía estar de duelo.

 

Envuelto en lúgubres sombras

creí que se caería el cielo

que el mundo rodaría al abismo

ensimismado te dejé partir.

 

Sabía que el cielo se apagaría

que las negras sombras del olvido

me hundirían en las olas de la perdición

sabiendo que sin ti moriría, te dejé partir.

 

Las plantas que un día florecían

hoy solo son pétalos chamuscados

las aves que antes cantaban

hoy guardan sepulcral silencio.

 

El café que ansiábamos beber

el rinconcito escondido del parque

donde nos dábamos furtivos besos

hoy luce desértico y acongojado

nuestro banco junto al cerezo

hoy luce solitario y desvencijado.

 

Sentado al borde del acantilado

donde siempre contemplábamos las olas

mi alma llora tu ausencia

sabiendo que sin ti moriría, te dejé partir.

 

LIma, 28 de setiembre del 2024

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