Mauro Enrique Lopez Z.

El engaño tuyo

El engaño tuyo, que no podías venir 

a casa porque, estabas con una dolencia 

en tu cuerpo.

Yo condolido te dije: en que 

puedo ayudarte? solo respondiste; en 

nada, ésto se me pasará.

Como yo quería divertime un poco, acudí a un 

festín, que solpresa la mía! 

Cómo estabas de contenta, bien abrazadita 

con un tipo, que no supiste que hacer.

Me dió igual, ahora no sabes que 

hacer para seguir a mi lado.

Quédese donde está, que así se ve más bonita. 

Mejor solo que sus mentiras. 

Hasta me divierto mejor, gasto menos 

en tus deseos de bebida y, soy felíz 

a mi manera sin tu presencia en mí.