...Aún quedan células que compartir,
poros que se quieren abrir,
bolígrafos con almas soñadoras,
cuartos crecientes y lunas nuevas
con las que llenar los silencios y las horas…
Aún quedan amigos,
aún quedan recuerdos,
aún vagan los fantasmas del olvido
por los rincones del alma,
aún se vierte la sangre ardiente de una poeta
en su pluma más combativa,
en su pluma más amiga,
en su pluma más luchadora,
en esa pluma cargada con palabras temidas
por eternos dictadores que hacen de la paz su guerra,
en esa pluma amada que vierte esperados poemas,
ansiados poemas por todos aquellos compañeros
que comparten los mismos horizontes,
que sueñan los mismos atardeceres,
que bostezan las mismas verdades
desde la más melancólica neurona
hasta el alma más henchida y tronadora …
Aún quedan amigos con el amor por bandera
al que escriben una y otra vez,
de inimaginables diferentes maneras
y cuando lo hacen por última vez
resuena con más fuerza de cómo fue la primera…
Aún quedan amigos que quieren soñar despiertos,
que quieren conquistar nuevas quimeras
y se lanzan al precipicio de los versos
con sólo el alma por bandolera…
Aún quedan amigos con conciencia…
Aún nos queda el recuerdo del ayer
como un nuevo hoy, amiga,
en este nuevo amanecer...