Anverso

Apetito

 

 

Conoces como hender mi narcosis

con la deleitable sapidez

de tu respiración vacilante,

de quejidos que se plantan

enhiestos ante los cantos de

sirenas furtivas y rabiosas

que tan solo pueden columbrar

el tórrido apetito de tu frenesí

desbordado de insolencia,

descaro y fingido recato...