Tal vez, detenga tu partida,
presiento, mi vida que te alejas;
no quiero que seas historia vieja,
mi alma, está quedando herida.
Tal vez, extrañe tu presencia,
contigo me siento relajado;
teniéndote cerca, aquí a mi lado,
me inspira tu más íntima esencia.
Tal vez, el destino así lo quiere,
cruel destino, tan inoportuno,
poniendo magia sólo en uno,
y hacer que el otro, en llanto quiebre.
Tal vez, no te he merecido,
mi palabra, muchas veces calla;
igual no quiero que te vayas,
por lo que aun no he cumplido.
Tal vez, tu corazón acongojado,
demore en aliviar este dolor,
le imploro a Dios que nuestro amor,
jamás, jamás vayas a olvidarlo.