Elizabeth Maldonado Manzanero

Mi padre

Mas de medio siglo de amor entregó con su vida

su lucha constate, por sacar a su familia abante

su creatividad y tenacidad lo hicieron salir del medio

un medio en el que la desdicha se refugiaba

hombre inteligente al que se le sumo un fuerte amor

una mujer le auxilio a hacerle al azaroso tiempo frente,

respeto y cariño imprimió en su piel, y todo infecto

a su alrededor y en la gente que le conocimos.

Como padre lo juzgo, amoroso, aun con su malicia.

doy gracias por la semilla de vida, por cultivar en mí

la inteligencia, por crecerme con su amor y compañía,

por sus certezas, que alimentaron mis alegrías,

por las penurias que frente a un plato de comida

y unas cómplices carcajadas se vieron desteñidas.

Su vida fue completa, hombre educado y prudente,

que me mostro lo duro y placentero que es dar lo mejor

siempre de uno mismo, llorar cuando se es necesario

y a luchar sin descanso por lograr nuestros anhelos.

No hay mucho que contar de un hombre generoso

a pesar de ser testigo de su singular vida.

Fue mi padre, eso es todo…, y es decir mucho en verdad.