¡Ay lápiz!
Delgado, puntiagudo,
Fino y rebosado
De tonalidades distinguidas
Mi cómplice fiel.
Quisieron destruirte para que yo ya no escribiera más
¡Ay! Querían exterminarte, hacer que te olvidara
Que terrible sería, lápiz.
No nos pudieron separar
Nadie, ni la propia guerra,
Ni los envidiosos
Que querían mandar a callar mis versos.
No pudieron, no,
No pudieron hacer que te olvidara.
Yo, yo te senté en mis piernas
Te senté en mi rodilla
¡Ay! Escribimos los versos mas bonitos
Los versos palpables, lápiz.
Los versos sentidos.
Ahora reposa en mi cartuchera
Que la noche es larga
Y hoy estoy un poco sentimental.