Patricia Aznar Laffont

A alucinar

En un País de Mudos

Ensordece un Gran Silencio.

 

Lo Abruma el Mármol.

 

Lo Sentencia lo Avieso,

De un Dejo de un Porvenir a Solas.

 

Desolado lo Sublime.

 

Deja Pasar su Sombra.

 

Derramadas Grietas Sólidas.

 

Hondura en Charcos Secos.

 

Barros Duelen.

Barro Enlodado en mi Ciudad.

 

Adoquines Sucios

Jadean Aviesas Alegrías.

 

Ahumadas las Penas, las Angustias.

 

Ser en Llamas.

Oculta su Invisible, Inquieta

Intangible Forma.

 

Pena Huele a Sangre

Derramada.

 

Coágulos de Sales en Empedrados.

Sin Contención.

 

Y Ya  Empieza a Alucinar.

 

Abstraída Sombra.

Longeva,

Inasible

 Visión de Muerte a Cuestas.

 

Emociones Contenidas

se Dilatan Fieras.

 

¡Dejá Atrás la Basura!

 

Ojos Perros Sedientos

Matan porque Quieren Morir.

 

Acorralados.

Espejados.

 Mágico Cristal Diabólico.

 

Vestigio Patria Albiceleste en  Hiriente Hondura

Soles Apagados, Muerden.

Cruz del Sur Sellada,

Desaparecida.

 

Amor quiere Salvarte.

Sacuden Balas.

Señala Tiempo

Que Jamás se Acaba.

 Demolido.

En Usura.

Violencia en Espasmos, Dura.

 

Ultrajado Pueblo.

 

Torvo, Humeante Fuego.

 

Y Nunca Empieza a Acabar.

 

Sólo Empieza Sordo a Alucinar

Empieza a Alucinar.

A Alucinar.

 

(Patricia)